¿Qué aplicaciónes tiene?

Las estrías son unos de los problemas que podemos tratar gracias a la Carboxiterapia, ya que el CO2 activa la circulación y favorece la creación de colágeno y elastina, atenuando la apariencia de las mismas.
El dióxido de carbono también ha probado su eficacia en la disminución de la caída del cabello, puesto que mejora la circulación del cuero cabelludo, proporcionado fuerza al cabello y mejorando la alopecia.
La Carboxiterapia sirve para la reducción de la grasa localizada, la celulitis y la flacidez su mayor aplicación a nivel estético, puesto que los resultados obtenidos son muy satisfactorios.

Carboxiterapia para reducir la GRASA LOCALIZADA y combatir la CELULITIS

La Carboxiterapia produce en nuestro organismo un efecto bioquímico, por lo que tiene una acción similar a la que conseguiríamos realizando ejercicio físico: reducir la grasa al estimular la oxidación de los ácidos grasos. Este tratamiento consigue además en mejorar los resultados en la grasa subcutánea, algo que el deporte por si solo no lo consigue. “Es la terapia perfecta para combinar con unos hábitos de vida saludables y eliminar la grasa resistente a las dietas y el ejercicio”

En cuanto a la celulitis, la aplicación subcutánea de dióxido de carbono en las zonas en las que la temida piel de naranja hace su aparición (piernas, glúteos, abdomen y brazos) consigue mejorar este problema en cuatro niveles:

• Mejora la circulación sanguínea y linfática ayudando a la eliminación de líquidos.
• Mejora el tono de la piel devolviéndole la elasticidad y reduciendo la flacidez.
• Reduce la piel de naranja y la aparición de los antiestéticos hoyuelos asociados a la celulitis.
• Disminuye el volumen de la zona y alivia los síntomas que acompañan a la celulitis, como la pesadez.

Carboxiterapia